Y ahora cómo se lo digo se
me retuercen las tripas me dan ganas de ir al baño pero no me puedo dejar
llevar por la ansiedad cómo se lo digo por dónde empiezo con lo serio lo que
grita cuando se cabrea que hasta se han llegado a quejar los vecinos de arriba
y también los de abajo pero esos me dan igual porque bastante les hemos
aguantado nosotros con esas fieras de niñas que tienen no quiero pensar que
hubieran sido niños pero ahora que lo pienso pues qué más da porque cuando un
niño o niña sale retorcido pues sale retorcido yo siempre he sido la rebelde
“rebelde sin causa” me llamaba mamá y yo creo que tampoco era tanto que más
bien era una niña buena lo que pasa es que me jodía tener que hacer todo el
rato lo que me mandaban aunque fuera una auténtica estupidez pero qué mal se lo
va a tomar qué mal se lo va a tomar porque nunca le gustó Oscar siempre le
pareció un vago un vivalavirgen un hombre que se aprovechaba de las mujeres
pero yo sé que no es así porque yo lo he visto currar como una bestia pero él
no y no y no y no se fía de mi palabra porque cree que le miento o que me tiene
engañada y que él es el que verdaderamente lo ha calado que él es el que le ve
el auténtico rostro y por eso porque soy su niña pequeña porque me quiere
proteger pero qué proteger si cuando me he ido yo de viaje él no estaba que me
he ido con mochila y he dormido en parques y me las he tenido que arreglar sola
él no estaba pues se había ido con mamá de viaje que me parece muy bien que no
digo yo que no pero porqué se tiene que meter en mi vida si yo no me meto en la
suya pero no sé por dónde empezar porque que Oscar y yo hemos decidido casarnos
se lo tengo que decir igual y a lo mejor se niega a ser mi padrino pues que se
ponga como se ponga que yo ya veré a quién se lo pido lo mismo se lo digo a
Pepe que para eso es mi hermano mayor que le he aguantado toda la vida
haciéndome putadas y que ya es hora de que me las pague todas juntas pues sí a
lo mejor hasta paso de papá porque llevarle de padrino con cara de ajo tampoco
me apetece nada pero qué disgusto para mamá que es una santa que lleva años
aguantándole sus ataques de genio y es la que escucha las quejas de las vecinas
estoicamente cuando en realidad es él el que tenía que dar la cara como en esta
ocasión coño que soy su única hija vale que he tenido con él mis encontronazos
pero en esta ocasión la de mi boda debería de hacer una excepción y mostrarse
comprensivo aunque no le guste Oscar aunque siempre haya pensado que es un vago
pues ahí va se lo digo y se lo digo y que salga el sol por Antequera.
Ilustración: Silvia Sanz
Texto: Esperanza Castro