Miro absorta como la arena juega con mis dedos, mis pies. El agua viene y va y allí al fondo los dos morros, dos montes como dos ánimas, uno avanzando retrayéndose el otro, el mayor protegiendo al joven que, miedoso, no se atreve a lanzarse al mar.
Como nosotros, como tú, como yo; yo arrastrándote y tú frenándome; tú velando por mí, yo dejándome querer por ti.
Y me siento en la orilla deseando que una de esas terribles olas me lleve, me haga desaparecer, pues sin mi “irmao”, sin mi igual, no soy más que un trozo de nada, otro morro cualquiera plagado por pequeñas favelas, nula mi personalidad.
Samba
Mi vista se pierde en la playa y mi memoria en aquel carnaval, en el desenfreno de un año que llegó para cambiar mi existencia toda.
Qué azar nos llevó a aquella fiesta. No recuerdo. Qué juego, qué estrellas, qué…
La música en mis oídos, y la risa; el baile en mi cuerpo, y el sudor, y tus manos. Mi cuerpo, tu tez, nuestras pieles, dos colores.
El calor, el sexo, la humedad nos envuelven, y tu mirada cómplice que dice: “vámonos, mi negriña”, y escapamos a esta playa, poblada e íntima y allá arriba, bien arriba, nos observa, nos bendice O Cristo Redentor.
- Me quedaré contigo para siempre –susurraste. Para siempre.
Tu boca, mi vientre, tus manos, mi pelo. Amor de mí, de ella, de la ciudad entera.
Amor de sus gentes que son mis gentes, amor de alegría y placer, amor de amor.
La simbiosis perfecta de un sentimiento mutuo.
Bossa nova
Epidemia. Terrible palabra en tus oídos cobardes, noticias de la enfermedad que azota sin piedad la ciudad amada.
Tu rostro desencajado mira sin ver el mío, la mente trastornada pensando sólo en huir. La cruda verdad que sin misericordia me rompe la vida y de paso, sin saberlo, también la tuya.
- Me asfixio –lloraste. Cuán dispares mi tristeza y tus lágrimas-, trata de comprenderme, no puedo seguir aquí.
¿Quién osa renunciar al paraíso?
- Cobarde –imploré–, nos dejas -y me ahogué.
- Ven conmigo –suplicaste mientras tus manos atenazaban las mías que frías, desangradas como toda yo, trataban de aferrarse a ti sin querer entender lo que estaba pasando.
Qué vacía invitación, sonó tan cruel. Sabiendo como sabías mi completa invalidez lejos de aquí.
- Quédate con todo –deseabas el divorcio de esta ciudad, el nuestro propio– quiero asegurarme de que no te falte nada.
- Nada -repetiste–, nada -palabras que ensordecen mis oídos mientras sigo con perdida mirada los mecánicos movimientos que preparan con urgencia tu maleta, mi mortaja.
Orgullosa y valiente me acerco al abismo, al ventanal desde el cual los contemplo. Y los veo allí, dos montes, Dois Irmaos, que apoyados el uno sobre el otro parecen llorar.
Doy la espalda a tu mirada y tu voz temblorosa murmura “volveré”, la que es tu última mentira y mi clara certeza del fin.
Carnaval
Sonrío en mi despertar al ritmo de los tambores que acompasan la alegría de mi ciudad, hoy sana y recuperada.
Observo divertida la vibración que producen en la superficie de mi vientre que se abulta por la presión de sus piernecitas.
Es carnaval y de nuevo el delirio lo inunda todo.
No he vuelto a saber de ti pero eso ya no importa pues la oquedad de tu ausencia se cubrió con entrega, cuidados y la certeza de la inminente llegada de la vida a mi vida.
Ilustraciones: Silvia Sanz
Texto: Esperanza Castro
Silvia, amiga mía, tus dibujos son JOYAS y, como tales, las debes guardar...
ResponderEliminarAdemás, estoy convencida de que hay que hacer algo con ellas. El mundo no se puede privar de verlas.
De nuevo, GRACIAS.
Maravilloso relato, me ha parecido muy original y me ha encantado.
ResponderEliminarMaravillosas pinturas Silvia.
Ambas sois dos artistas como la copa de un pino.
Salid al mundo y mostrad vuestro arte, no seáis egoístas.
Enhorabuena para ambas.
Lourdes
Tristeza não tem fim
ResponderEliminarFelicidade sim
A felicidade é como a gota
De orvalho numa pétala de flor
Brilha tranquila
Depois de leve oscila
E cai como uma lágrima de amor
A felicidade do pobre parece
A grande ilusão do carnaval
A gente trabalha o ano inteiro
Por um momento de sonho
Pra fazer a fantasia
De rei ou de pirata ou jardineira
e tudo se acabar na quarta feira
Tristeza não tem fim
Felicidade sim
A felicidade é como a pluma
Que o vento vai levando pelo ar
Voa tão leve
Mas tem a vida breve
Precisa que haja vento sem parar
A minha felicidade está sonhando
Nos olhos da minha namorada
É como esta noite
Passando, passando
Em busca da madrugada
Falem baixo, por favor
Prá que ela acorde alegre como o dia
Oferecendo beijos de amor
Tristeza não tem fim
Felicidade sim
Tom Jobim
el relato trajo a mi memoria el canto de Jobim.
muy bien narrado, llevándonos de la mano a esa tragedia tan común de soledad despues de una noche de amor.
En este caso soledad a medias.
Las ilustraciones, como siempre, devoradoras.
Placer total, gracias Tati.
Daniel Romay dice:
ResponderEliminarMi Tati, un relato sensacional, de grandes ligas.
Al igual que a Marion, me ha transportado en un Bossa Nova de Juan Carlos Jobim en Orfeo Negro. Amor, sensualidad, desengaño, abandono... ¡redondito! ¡estupendo! Beijos brasileiros.
♫♪♫♫♪ Tristeza não tem fim,Felicidade sim... ♫♪♫♫♪
Enhorabuena un relato sensacional cada día me sorprende mas tu capacidad para los relatos, tu apertura esta indicando la fluidez con la que te expresas o te expresas con fluidez por tu apertura? en fin diría estas entrando en tu sabiduría interior y expresando desde el corazón..... palabra clave sensibilidad, Felicitaciones igualmente para la expresión artística.Besitos desde mi corazón. Mari Luz.
ResponderEliminarq bonito!!!!!!!! gracias chicas.
ResponderEliminarel relato me ha encantado y las ilustraciones son preciosas.
gracias tb a marion por el canto de Jobim.
besos gordos!!!!
Tu texto dice mucho con poco, y los dibujos aderezan divinamente
ResponderEliminarTe felicito
El relato precioso!!
ResponderEliminarY las ilustraciones maravillosas, llenas de vida.
Felicitaciones a las dos!
Relato romántico con final de feliz aceptación. Mejor así.
ResponderEliminarMe gustó mucho.
mcjaramillo
TATI QUERIDA... ¡¡¡Qué maravilla!!! las palabras, la luz, los dibujos. Brasil es saudade, música, magia, y mientras te leía las ♫♪ de Jobim me acompañaban. Dos JOYAS para esta tarde de jueves. Besos.♥ ♥
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo con Pilar Gorbano, es un relato que contiene mucho implícito. Cada frase tiene todo un fondo de significados detrás. Podría dar tema para una novela entera. Enhorabuena, Tati. Tu imaginación ha creado una historia con mucho encanto.
ResponderEliminarLa verdad que lo lei antes pero me dejó sin palabras para comentarlo .
ResponderEliminarhoy lo volví leer y sigo igual solo puedo decir
PRECIOSO felicitaciones a las 2 artistas
Lindo texto de amor, entrega, engaño y fruto. La delicadeza de las pinturas lleva el sello del colorido Brasil.
ResponderEliminarEncantador!
Un beso.
Me habéis dejado perpleja las 2 !!!! Hacéis un tandem perfecto !! Creo que estos ritmos latinos , que a Tati tanto le gustan ( no sé si a Silvia ) deberían continuar .... no sé ....relatos de merengues y bachatas .... de salsas o danzones .....mirad que a las 2 estos amores caribeños desgarrados se os dan muy bien !!!
ResponderEliminarMucho éxito en vuestra próxima aventura !
Besos
Tati... En qué estaría pensando cuando te comenté al principio. ¿Sería que me dejaste lelo con tu relato? Antonio Carlos Jobim -Tom Jobim- uno de mis autores preferidos y le he cambiado el nombre. ¡vaya pues!
ResponderEliminarMe gustó leer el texto. Lo sentí como un vaivén de mar, muy bonito. Las ilustraciones, por supuesto, me encantaron. La segunda ilustración ancla todo de forma que no cabe la falta de esperanza. Otra vez, me gustó el conjunto. Enhorabuena.
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